Sabes ¿cuál es la gran diferencia de tener un molino para carne y una máquina de embutidos en un restaurante? Pues ambas herramientas son la clave para mantener la calidad de los platillos. Con un molino de carne industrial, controlamos la textura de la carne para distintas recetas, desde hamburguesas hasta carnes para salsas. En cambio, una máquina de embutidos nos permite crear nuestros propios embutidos frescos, personalizando los sabores y manteniendo un control estricto sobre los ingredientes que utilizamos. La verdad es que tiene muchos beneficios poder contar con estas herramientas. También, con el molino, evitamos la carne procesada y garantizamos la frescura. Esto nos permite elegir cortes de carne y controlar su calidad. Además, la máquina de embutidos nos ayuda a evitar aditivos innecesarios y conservantes, produciendo embutidos más naturales y sabrosos. Las consigues con Novateam, por ejemplo. Espero que les guste el dato.